Los robos en establecimientos comerciales aragoneses se han convertido durante la crisis económica en un quebradero de cabeza para sus propietarios. Pese a que los delitos en este sentido han descendido levemente ene l primer trimestre del año, los daños y pérdidas todavía son notables en un sector castigado ya de por sí por la caída del consumo.
Un buen termómetro para comprobarlo es la memoria anual del Seguro en España, elaborada por Unespa y presentada esta semana, según la cual los comercios de la Comunidad emiten más de cien partes al mes a sus aseguradoras por robos y destrozos en sus locales.
Si bien es cierto que la mayoría de los 11.800 sucesos reclamados el año pasado en Aragón tienen que ver con rotura de cristales, incendios y daños por agua, los robos representan un porcentaje muy importante de las indemnizaciones. En todo el país se tramitaron más de 45.000 partes por esta causa, con un valor estimado de 80,4 millones de euros.
Los bares españoles, con un robo cada cinco minutos, son los mayores perjudicados, seguidos de las tiendas de alimentación (diez minutos), los restaurantes (13 minutos) y las oficinas y despachos (uno cada cuarto de hora).
Fruto de esta presión delictiva, los propietarios han intensificado los mecanismos de vigilancia y control en sus establecimientos. Solo en Aragón, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) tiene registrados 5.314 circuitos de videovigilancia privados, a los que hay que sumar los 177 que existen en la actualidad de titularidad pública. Son prácticamente el doble que en 2012, cuando en total había 2.859 registros, lo que refleja el interés por este tipo de medidas de protección.
Además, hay que tener en cuenta que cada registro hace referencia a una instalación, que puede constar de una sola cámara, o de cien. Según los datos de la AEPD, en toda España hay 50.368 registros en comercios, la actividad que más cámaras utiliza, seguida de la hostelería con 25.061 y de las comunidades de vecinos con 16.283. En todos los casos se ha duplicado la cifra en los últimos tres años.
En Aragón hay en vigor 34.000 pólizas de seguros relativas a comercios, que sufrieron 11.800 siniestros de algún tipo.
También en los vehículos
Otro de los objetivos que los ladrones ponen en su punto de mira son los automóviles. Según los datos del Ministerio del Interior, Aragón sufre cada año en torno a medio millar de sustracciones de vehículos, la mayoría en la provincia de Zaragoza.
Sin embargo, los partes por robos que reciben las aseguradoras son mucho mayores. En concreto, el año pasado se registraron 3.467 debido a las sustracciones en el interior de los coches (maletas, equipos de sonido, GPS...) y de las motos (cascos).
Sirva como ejemplo la última detención realizada por la Policía Nacional, el pasado mes de mayo, en la capital aragonesa. Un hombre de 36 años fue acusado de perpetrar al menos cinco robos en vehículos del barrio de Las Fuentes.
Fuente: heraldo