Flores asegura que ha legalizado 34 cámaras de control del tráfico

Después de que el concejal socialista José Nogueira dudase de la legalidad de los siete juegos de cámaras instalados en el recorrido de la vía prioritaria vigilada, el concejal de Seguridad y Movilidad remarcó ayer que los dispositivos cuentan con el permiso municipal, «que es el único que necesitan porque son cámaras de control de tráfico y solo enfocarán a la calzada y a los vehículos para evitar la doble fila». Flores apuntó que en este caso solo es necesario la autorización del responsable municipal de Seguridad, y no la de la Delegación del Gobierno, como había asegurado Nogueira el martes.

En una intervención en el programa Voces de A Coruña, de Radio Voz, el edil pasó al contraataque y señaló que no solo ha firmado los permisos de estas siete nuevas cámaras, sino también de las 34 instaladas desde 1993 y que, apuntó, «no contaban con la pertinente autorización municipal ni estaban dadas de alta en la Agencia Española de Protección de Datos». El portavoz del gobierno local lamentó que se haya visto obligado a firmar una resolución de urgencia para corregir una situación «absolutamente ilegal».

Explica Flores que esas irregularidades se han detectado durante la tramitación administrativa del expediente y afeó a Nogueira que ponga en duda la legalidad de las cámaras instaladas en la vía prioritaria «cuando durante su etapa de gobierno ni siquiera cumplió la legislación», lo que obliga al Ayuntamiento a «perder el tiempo» en legalizar sus actuaciones.

Flores también negó que se haya cobrado la tasa del párking exprés antes de su aprobación en el pleno del lunes, asegurando que solo «se cobra la tarifa de ORA general en las plazas pintadas de azul, como establece la ordenanza y, dentro de unos días, se comenzará a cobrar la nueva tarifa que regula las plazas de párking exprés».

La oposición pide cambios

Frente a las explicaciones de Flores, la oposición volvió a urgir ayer un cambio de rumbo en la política de movilidad del gobierno local, que los socialistas tildaron de «nefasta». Desde el PSOE reiteraron su «rechazo a las dos únicas medidas aplicadas por el alcalde del PP: subida lineal del bus en cinco céntimos, también a parados, jubilados y pensionistas, y retirada del carril bus, lo que ha redundado en el incumplimiento de frecuencias».

Por su parte, el portavoz del BNG, Xosé Manuel Carril, reclamó un cambio de rumbo en la política de movilidad, «excesivamente baseada no automóbil privado que ten importantes consecuencias negativas». Carril reclamó mejoras en el servicio del bus urbano, tanto en frecuencias como en la rebaja de la tarifa, así como el aprovechamiento de las vías ferroviarias existentes para articular una nueva conexión con la comarca.