Los robos en la piscina del Termet obligan a instalar cámaras de control
El consistorio también contrata a una empresa de seguridad para “garantizar el bienestar de los usuarios”. Los dispositivos vigilan las zonas de taquillas de los vestuarios, el acceso a los mismos y la valla perimetral.
La Concejalía de Deportes de Vila-real ha decidido instalar cámaras de vigilancia en el recinto de la piscina de verano del Termet, con la finalidad de evitar que se vuelvan a producir los continuos casos de pequeños hurtos en la zona de las taquillas, donde algunos usuarios aprovechaban la falta de vigilancia para romper las cerraduras de las puertas y sustraer todo tipo de enseres personales que los usuarios habían guardado en su interior, como dinero, ropa o teléfonos móviles.
Así lo ha informado a Mediterráneo la edila del área, Silvia Gómez, quien señala que la decisión de colocar sistemas de vigilancia se ha hecho efectivo “ante las peticiones de los usuarios y tras analizar la situación y ver que se forzaban las taquillas para robar en su interior”, argumenta.
En concreto, se han habilitado cámaras en el interior de los vestuarios, así como en las puertas de acceso a los mismos y otras enfocadas a la valla perimetral para evitar entradas ilegales al recinto. “Esperamos que ahora la situación se normalice y estos hechos no vuelvan a suceder”, afirma.
Asimismo, Gómez confirma que desde el consistorio se ha decidido contratar a una empresa de seguridad para garantizar el bienestar de los usuarios de la piscina. “Nuestro objetivo es que toda la gente pueda disfrutar de estas magníficas instalaciones, pero con respeto y haciendo un buen uso de ellas”, señala.
La edila se muestra satisfecha con los datos que avalan “el éxito” de este recinto estival, ya que se cuentan por cientos los usuarios que a diario hacen uso de estas instalaciones tanto por la mañana, a mediodía y sobre todo por las tardes, donde incluso es difícil encontrar un hueco para extender la toalla. “Viene muchísima gente y nos alegra, por eso pusimos estos precios tan populares para que nadie se quedara fuera y pudiera disfrutar de un chapuzón. Durante este año hemos mejorado la zona de pic-nic, se ha arreglado el vallado, hemos mejorado el baño adaptado y seguiremos haciendo trabajos para que esta instalación esté en perfectas condiciones”, resalta.
Cara al próximo año, Gómez se plantea la posibilidad de implantar una especie de tarjeta ciudadana, para dar prioridad en el precio a tan bajo coste a los empadronados en la ciudad, frente a los vecinos que acuden a esta piscina municipal de otros municipios limítrofes. “Ahora todas las personas que acceden a la piscina pagan un euro, si son menores de 13 años; y dos euros si son mayores”, destaca la concejala.
Fuente: elperiodicomediterraneo