La inoperatividad de las cámaras de vigilancia que deberían contribuir a garantizar la seguridad del pazo de Xustiza de la capital ourensana, y a evitar los asaltos que está sufriendo la sede en las últimas semanas, podría ser resuelta en unas semanas.
Así, y tras meses inservibles, los técnicos comenzaron el pasado lunes a recoger los aparatos para proceder a su reparación y poder conectarlas en un corto plazo de tiempo. La maniobra se produce solo unos días después de que se hiciese pública la situación, nunca denunciada por los operadores judiciales ourensanos.
Mientras, continúan las investigaciones para tratar de localizar a las personas que, la semana pasada, colocaron un artefacto explosivo de fabricación casera en una de las ventanas del edificio judicial, la que se encuentra situada en la zona más oculta del edificio y cercana a un jardín. El objeto no llegó a explosionar pero fue necesaria la presencia de los tédax para retirarlo sin riesgos. La situación de las cámaras ha evitado que se haya podido identificar a los sospechosos.
FUENTE: www.lavozdegalicia.es