En por lo menos tres ocasiones, distintas administraciones municipales han hecho cuantiosas inversiones de su presupuesto en la adquisición, instalación y puesta en funcionamiento de un número importante de cámaras de seguridad. Estos aparatos han sido colocados en las esquinas y en los sectores más críticos, desde el punto de vista de la seguridad de la ciudad.
Por supuesto, como todos los aparatos y elementos tecnológicos, y más cuando operan al sol y al agua y muchas veces expuestos a la mano destructora del hombre, necesitan cuidado y mantenimiento preventivo y periódico para que puedan prestar su servicio de manera eficiente, efectiva y oportuna, y para que sean un apoyo valioso de las autoridades en la tarea de vigilancia de la ciudad, de lucha contra el delito y de persecución de los delincuentes.
Lastimosamente en Pereira nadie se ha preocupado por hacerles mantenimiento a las ya viejas cámaras de seguridad y mucho menos de reparar las que, por falta de atención, han dejado de prestar el servicio. Y hoy, para fortuna de los delincuentes, de los expendedores de droga y de los raponeros, prácticamente ningún aparato de estos está funcionando.
Cámara que se dañe, cámara que se queda así. No hay ninguna entidad, ni oficina, ni funcionario encargado de su cuidado y reparación, ni mucho menos presupuesto para arreglar o reponer los aparatos que van dejando de funcionar o que, como ocurre tantas veces, son destruidos por los bandidos que ven en ellos a unos enemigos para cometer sus fechorías.
En todas partes del mundo y por supuesto en muchas de nuestras ciudades, las cámaras de seguridad son unos elementos vitales para la lucha contra el crimen y una ayuda de primer orden para las autoridades para identificar y capturar a los responsables de muchos delitos callejeros. Por eso, sorprende que en Pereira a nadie le importe el estado de estos aparatos y mucho menos que se interesen por arreglar o reponer los que se van dañando.
Si de verdad hay interés en las autoridades por tener una ciudad muy segura, especialmente en los próximos días cuando se celebre el Mundial de Fútbol, una circunstancia que ayudaría mucho es tener todas las cámaras de seguridad de la ciudad funcionado perfectamente. Por eso, sería bueno que la administración encargue a alguna oficina de esto y destine los recursos suficientes para su recuperación y mantenimiento.
FUENTE: www.eldiario.com.co