El conseller de Interior de la Generalitat, Felip Puig, ha reiterado este lunes que revisará la instalación de cámaras de seguridad en las comisarías de los Mossos d'Esquadra, aunque mantendrá las existentes.

Puig ha destacado que el sistema "es positivo si se utiliza bien" y que debe ser un instrumento que facilite el trabajo de la policía y que garantice la transparencia y seguridad "tanto a ciudadanos como a los propios mossos".

"En algún momento se quiso dar una visión de que este sistema servía para controlar y generar una cierta desconfianza sobre el funcionamiento de nuestra policía", ha matizado Puig, que ha asegurado que intentará "eliminar cualquier sombra de duda".

Ha explicado que, pese a que mantendrá las cámaras existentes, pretende conseguir que se conviertan en un sistema "que sirva de verdad para que los mossos se sientan respetados y seguros".

El 27 de diciembre Puig avanzó que revisaría la instalación de cámaras de seguridad en las comisarías de los Mossos d'Esquadra y que, por el momento, paralizaría que se instalen nuevos dispositivos.

Ese mismo día, Puig señaló que entre sus primeras decisiones estará la de retirar el límite de velocidad a 80 kilómetros por hora en los accesos a Barcelona, algo que también ha reiterado en esta ocasión.

Ha explicado que quiere buscar el "equilibrio" entre la necesaria apuesta por políticas de reducción de la contaminación, políticas de seguridad viaria y el principio de responsabilidad y libertad de una sociedad que, según Puig, "debe tener no solo una actuación institucional sino también un principio de compromiso individual".

Ha concretado que en las próximas semanas se consultará con los técnicos y con varias asociaciones y se impulsará un grupo de trabajo. "Continuaremos trabajando para disminuir el numero de muertos, pero tendremos un modelo de seguridad viaria más orientado a una lógica, que no obedezca solo a unos determinados principios sino a una visión mas global", ha concluido.


FUENTE: www.europapress.es