TECNOLOGÍA
Esta es la red de videovigilancia más grande y sofisticada del mundo.
Existen cerca de 170 millones de cámaras de circuito cerrado desplegadas por toda China
El uso de la tecnología para el desarrollo y progreso del ser humano es evidente. Los beneficios son muchos y prácticamente innumerables, aunque en algunas otras circunstancias no lo son tanto y hasta podrían parecer una exageración.
Por citar uno de estos ejemplos, China decidió construir un nuevo sistema calificado como "la red de videovigilancia más grande y más sofisticada del mundo" con el objetivo de mantener vigilados a sus más de 1,300 millones de ciudadanos.
Hasta el momento se ha dado a conocer que existen cerca de 170 millones de cámaras de circuito cerrado desplegadas por todo el país, donde muchos de estos dispositivos están equipados con inteligencia artificial.
El grado de desarrollo tecnológico de estos aparatos es tan alto que tienen la capacidad de reconocer rostros, descifrar la edad, etnia e inclusive el género de las personas.
En caso de ser necesario, este sistema podrá obtener fotografías de las personas realizando su vida cotidiana y compararán con los registros de identidad de la misma, para acceder a toda su información y rastrear cada uno de sus movimientos.
De tal manera que si una persona se encuentra bajo investigación y resulta sospechosa, el sistema enviará una alerta a una sala de control e inmediatamente después reportará a las autoridades correspondientes.
Evidentemente el desapruebo y los cuestionamientos por esta clase de métodos no se hicieron esperar, y organizaciones de derechos humanos como Human Rights Watch, declararon que esta clase de sistemas de seguridad significan una violación de la privacidad de la gente, aunque es importante señalar que el gigante asiático carece de leyes que protejan la privacidad.
A pesar de las diferentes inconformidades esta red de videovigilancia va en aumento, a tal grado que diferentes compañías locales y extranjeras se encuentran invirtiendo en start-ups tecnológicos que se especializan en el software de reconocimiento facial.
El negocio de la videovigilancia generó en China cerca de $6,400 millones en el 2016, según corroboró la firma de análisis IHS Markit.