El manejo de los datos personales de las grandes empresas de telecomunicaciones, las grabaciones en la vía pública por cámaras de vigilancia y la privacidad de los usuarios se consolidaron en 2010 como principales campos de actuación de la Agencia Española de Protección de Datos. Durante el año pasado, este organismo llevó a cabo 4.302 investigaciones, ya fuese a raíz de denuncias privadas o iniciadas de oficio. Entre estas, se iniciaron 767 procesos sancionadores de los que 591 finalizaron con la imposición de multas, que en su conjunto sumaron 17,4 millones de euros. Además, la Agencia recibió 1.642 solicitudes de ciudadanos para la tutela de sus derechos de acceder, cancelar, oponerse o rectificar sus datos.
Los ámbitos de actividad que recibieron un mayor número de reclamaciones fueron las telecomunicaciones, con 1.170 investigaciones, la videovigilancia (819), las entidades financieras (691) e Internet (168). Este último campo es uno de los que más se ha visto incrementando en los últimos años, una tendencia que continuará en aumento, según alerta el director de la Agencia, Artemi Rallo, dados los continuos avances tecnológicos que experimenta el sector. Las redes sociales, la difusión de datos en foros o blogs, vídeos subidos a plataformas sin permiso de los protagonistas o la suplantación de identidades en portales de contactos personales son algunos de las infracciones que han crecido en Internet a lo largo del año pasado.
Rallo ha querido destacar, igualmente, la vigilancia que se ha mantenido desde la Agencia a algunas de las grandes compañías del sector, como Google -en base a los datos personales que capta sin conocimiento del ciudadano mediante su servicio Street View- o Facebook y MySpace, ambas por la supuesta transmisión de datos de perfiles a anunciantes y otras empresas. Igualmente, el director ha avanzado la intención del organismo estatal de investigar el robo de datos que ha sufrido Sony en sus servicios online, y que según admitió la compañía podría haber afectado a 300.000 españoles, algunos de los cuales incluso habrían visto expuesta la información de sus cuentas bancarias.
Rallo ha destacado igualmente la creciente preocupación de la ciudadanía ante el conocido como derecho al olvido en Internet, que es calificado como un “demanda emergente”. Así, los españoles reclaman cada vez con mayor intensidad la posibilidad de ejercer un control sobre su información privada que se publica en la red, incluido el de no aparecer en ella. El origen de estas situaciones se encuentra en la publicación de datos personales en boletines oficiales, medios de comunicación digitales, sentencias y diversos sitios web que luego los motores de búsqueda mantienen en su memoria y a los que se puede acceder a lo largo del tiempo.
El número global de consultas de los ciudadanos ascendió en 2010 a 104.826 –un 8,2% más que en 2009- y en su mayoría estuvieron dirigidas a temas como la inscripción, modificación, y supresión de ficheros, la videovigilancia, los ficheros de morosos o la publicación de datos en Internet, especialmente los relacionados con el motor de búsqueda de Google.
FUENTE: www.elcorreo.com