La proliferación de incendios forestales en la sierra de Sanabria refuerza la voluntad de la Consejería de Medio Ambiente de instalar cámaras de videovigilancia, según explicó con cierto énfasis el delegado Territorial de la Junta de Castilla y León, en Zamora, Alberto Castro. Unos dispositivos rechazados por algunos ayuntamientos y juntas vecinales por entender que pueden afectar a la privacidad de las personas.
Castro repasó ayer la campaña de incendios, que en lo que va de año ascienden a un total de 168 y suman una superficie afectada de más de 1800 hectáreas, de las que 329 corresponden al ocurrido el pasado domingo en la sierra de Chanos. Además, existe la convicción de que «la mayoría son provocados», sin especificarse, de momento, el sector interesado en las quemas.
El delegado territorial recalcó que la Junta ha puesto en marcha «más medios que nunca» a estas alturas del año, puesto que cuenta con dos medios aéreos, pertenecientes uno a la base de Rosinos de la Requejada y el otro a Villardeciervos. Dos medios «que nunca se han tenido en estas fechas» insistió.
Refiriéndose a los hechos, señaló que «los datos son aplastantes» en cuanto a revelar los puntos más calientes de la provincia. Precisó que «Hermisende registra 36 incendios, Lubián 11 , Pedralba de la Pradería 9, Robleda 6 y San Vitero 5». La Junta de Castilla y León, dijo, «pone los instrumentos para minimizar las consecuencias de los incendios, pero es triste ver que en Hedroso en una semana se intentara quemar en cinco veces seguidas».
«Como no intensifiquemos la vigilancia no conseguiremos nada. Poner un vigilante en cada piedra, cuneta o cerro es imposible. Donde se plantea la colocación de vigilancia es donde vemos que se producen los incendios» expresó Alberto Castro.
Señaló, sobre el particular, «que la instalación de cámaras ya cuenta con autorización en algunos ayuntamientos, y donde son rechazadas tratamos de hacer una campaña de sensibilización sobre lo que queremos». De todos modos, apuntó, «no está previsto colocar ninguna antes del inicio del verano».
Insistió Castro en que «poner en marcha las cámaras lo antes posible, además de los elementos de extinción, es tan urgente como hace un año o más». Aún prosiguió con la importancia de implantar este operativo y afirmó que «la cámara no es cuestión política, es para vigilar solamente dónde se produce el incendio. Son una necesidad ecológica y de seguridad para los agentes forestales que van a jugarse la vida al apagar los incendios Son una necesidad para vigilar el medio Ambiente, no la vida cotidiana de nadie. Nadie va a enfocar si alguien está paseando. La cámara hace un barrido automático y se para cuando hay un incendio». Según el delegado territorial «la vigilancia lo que hace es detectar con mayor rapidez donde se produce el incendio y realizan una labor de prevención porque quienes provocan los incendios se lo pensarán dos veces antes de prender. Si se detecta, la Guardia Civil puede llegar a cortar el paso». Sobre este particular manifestó «que es lo que hacen las cámaras en Soria».
Considera que la instalación de cámaras repercutirá en la comisión de incendios forestales porque «acortan los tipos de respuesta» de los medios contraincendios y que persiguen la comisión de estos delitos. «Se ponen donde ocurren los incendios, no al revés, y su colocación se motiva y justifican aún más porque vemos los datos y donde sistemáticamente todos los años se producen los incendios. Son una necesidad de vigilancia. Si en Lubián se producen once incendios, dos de un tamaño importante, tienen que permitir las cámaras».
Criticó a quienes «ponen impedimentos administrativos para no instalarlas», y especialmente al Partido Socialista. «No se puede hacer campaña de todo, y el PSOE no puede explicar en los pueblos que van a vigilar la vida cotidiana de los pueblos». Al respecto mencionó «al candidato por Zamora, Manuel Fuentes». Hoy, apuntó, «cuando se han quemado más de 1.500 hectáreas, deberían verlo y gustaría contar con un apoyo institucional».
«En algunos pueblos el partido socialista ataca a la Junta con las cámaras de vigilancia» añadió. Para Castro «vale todo para apagar los incendios y evitar que alguien pueda jugarse la vida». Subrayó que «el monte es de todos» y consideró que «tienen que tener más sensibilidad los que viven allí».
Para el delegado «los culpables son los que van con un mechero, con una cerilla o la gasolina y provocan el incendio», e hizo un llamamiento «a la colaboración ciudadana y a la sensatez», y pidió que «la gente piense dos veces dónde, cuándo y las consecuencias de un incendio».
FUENTE: www.laopiniondezamora.es