El presidente de la Gestora de Usuarios del Parque García Sanabria, Abel Román, ha solicitado por tercera vez la legalización de las 24 cámaras instaladas en la zona
MARYORIE GONZÁLEZ Román considera que la presencia policial sigue siendo escasa y no cree que se vaya a mantener a lo largo del año. Por eso, junto a otro grupo de vecinos aprovechan sus paseos para vigilar la zona y de cometerse alguna infracción no dudan en comunicárselo al cuerpo de seguridad. "Nosotros realizamos patrullas informativas en las que aconsejamos a los paseantes y avisamos a la Policía", explica.
El presidente de las Gestora junto con los más de 2.000 ciudadanos que forman parte de la asociación consideran que la puesta en marcha de las cámaras ubicadas en el García Sanabria es urgente debido a que en el recinto se comenten uno o dos delitos diarios, según sus datos.
"El problema de estas denuncias es que la mayoría no se refleja en los informes policiales por lo que no llega a la Comisión", explica Román. En este sentido, lamenta que "lo único que interesa a los funcionarios es conocer los números fríos de los delitos".
Cansados
Los vecinos cansados de recibir negativas por parte de la Comisión han emprendido nuevas acciones y han enviado una carta personal dirigida al responsable de la Comisión de Videovigilancia. En la misma, los perjudicados expresan su preocupación por la presencia de vendedores de drogas "que actúan con toda impunidad ante la ausencia policial", los múltiples robos y asaltos a turistas y a menores que acuden a este céntrico recinto de Santa Cruz.
Además, aseguran que se citan pandillas de 20 y 30 personas para enfrentarse entre ellas. "Un bonito espectáculo de tranquilidad para los padres que paseamos a nuestros niños pequeños", subrayan.
La gestora recuerda que los criterios que se tienen en cuenta según la ley para el encendido de las cámaras en espacios públicos se basan en puntos como que se trate de un lugar de importancia para la defensa nacional, que proteja las propiedades municipales de valor o que prevengan que se produzcan delitos. Este último requisito se cumplen a la perfección en este caso, afirma Abel Román.
FUENTE: www.laopinion.es