La Junta Vecinal de Aciberos, como titular del monte El Piornal, ha denegado la cesión de suelo a la Fundación Patrimonio Natural para instalar una cámara de videovigilancia dentro del Plan Piloto de Desarrollo Rural suscrito entre la Junta de Castilla y León y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino. La directiva de la Junta Vecinal, formada por seis miembros, se reunió recientemente y tomó este acuerdo que trasladará a la asamblea de vecinos. El presidente de la Junta vecinal, Guillermo Tejera Carracedo, explicó que la finca en cuestión «es una propiedad privada y no necesita que nadie la vigile». El presidente trasladó el malestar del vecindario: «de Medio Ambiente hemos necesitado mucho y no se nos ha dado nada». El representante de los propietarios del monte precisó que «estamos dispuestos a hablar y con unas condiciones, pero de momento de instalar cámaras nada». El representante de la comunidad vecinal cuestionó que desde las cámaras se vigile indiscriminadamente a todas las personas que están realizando cualquier actividad dentro de los terrenos de la Junta Vecinal.
Guillermo Tejara dejó bien claro que la Junta y el personalmente «estamos en contra de los fuegos y de los incendios y estamos a favor de las repoblaciones» y de las quemas controladas para la obtención de pastos. Precisamente el presidente de la asociación vecinal de Aciberos explicaba que este año no subirán hasta la sierra los pastores trashumantes de Aliste que tenían arenados los pastos «porque el pasto está viejo». Desde la Junta vecinal se han pedido quemas controladas que no se han realizado en las propiedades del colectivo. Guillermo Tejera defendió que esas quemas se hagan en las zonas donde no hay arbolado o robledal, en las zonas de monte bajo, donde proliferan carqueixas y urces, «que aunque se quemen se renuevan todos los años». La última quema se solicitaría hace unos dos años pero no se ejecutó porque las condiciones para los días señalados no eran favorables, tampoco se dio la opción de trasladarla a otra fecha «los vecinos subieron con al merienda y fue lo que hicieron, comer la merienda».
El descontento vecinal también incluye la denegación de la Consejería de Medio Ambiente de rehacer presas para el riego de fincas y habilitar, de paso, zonas para que las truchas puedan desovar y repoblar los cauces porque «no tenemos truchas en el río».
El Ayuntamiento de Lubián recibió la solicitud de suelo por parte de la Fundación de Patrimonio Natural, que a su vez trasladó a la Junta Vecinal propietaria de la finca elegida para ubicar una de las once cámaras contempladas en el proyecto de Medio Ambiente, con un coste cercano a los 1,5 millones de euros.
FUENTE: www.laopiniondezamora.es