En una entrevista concedida a Catalunya Ràdio, Puig hizo especial hincapié en algunos de los puntos más polémicos de la gestión de Saura, como las cámaras de videovigilancia en las comisarías de los Mossos d’Esquadra, el Código de Ética policial y el límite de los 80 kilómetros por hora en los accesos a Barcelona.
Cámaras polémicas
En la entrevista, Puig aseguró que revisará la instalación de cámaras en las comisarías y que, de momento, paralizará la implantación de este tipo de dispositivos. La polémica con las cámaras viene de lejos, y tiene su origen en el episodio de malos tratos hacia un preso registrado en la comisaría de Les Corts. Tras filtrarse la grabación, los Mossos mostraron un gran malestar con la conselleria, y fue el primero de una larga serie de desencuentros.
Puig explicó que de momento analizarán si las cámaras que hay «sirven de verdad o si son una medida que genera desconfianza, tensión e intromisión en el funcionamiento normal de las comisarías».
«Tengo la percepción de que ha habido algunas medidas que se han orientado no tanto a la obtención de resultados y a la eficacia sino a imponer e impulsar una sensación de desconfianza en nuestra policía», dijo Puig, en clara referencia a la polémica gestión de Saura.
El nuevo conseller confirmó que de momento pararán la instalación de nuevas cámaras y revisarán las que se han instalado hasta cerciorarse de que son útiles, aunque no concretó si llegarán a desinstalar algunas de ellas.
Además, Puig confirmó que retirarán el Código de Ética de Saura y desmantelarán el Comité de Ética, presidido por el ex fiscal Carlos Jiménez Villarejo, porque se hizo «sin consenso y con un sesgo ideológico que no fue positivo». El citado Código de Ética fue uno de los puntos más calientes de la gestión de Saura. Con la oposición del resto de fuerzas políticas y de los Mossos, el tripartito dio luz verde a un manual de buenas conductas. La Policía Autonómica vio en esta normativa un descrédito hacia su trabajo, y celebraron el anuncio de CiU de la derogación del código.
Puig opinó que con esta medida la conselleria «tuvo una postura excesivamente reglamentista y de imposición», y consideró que «muchas otras medidas se impulsaron sin contar con el consenso dentro del tripartito, y con una visión legítima pero muy pequeña, muy poco transversal y abierta».
El nuevo titular de Interior también señaló que entre sus primeras decisiones estará la de retirar el límite de los 80 kilómetros por hora, aunque apuntó que tienen que mirar qué medidas de flexibilización aplicarán y cómo revisarán este límite, que creó una fuerte polémica.
FUENTE: www.larazon.es