“Un proceso iniciado hace cuatro años cuya primera fase estará operativa en octubre” según ha anunciado el alcalde de l’Alfàs del Pi, Vicente Arques que supone sentar las bases tecnológicas para a corto medio plazo no sólo colocar más cámaras, si fuese necesario, sino abrir el entramado tecnológico a nuevas aplicaciones.
Ha llevado su tiempo porque precisaba de unas dependencias policiales adecuadas y había que esperar a tener el nuevo Retén en marcha, inaugurado recordamos a finales del año pasado. Además previamente y por cuestiones crematísticas se ha modificado un convenio existente entre Abertis Telecom y el Ayuntamiento, entre otras razones porque había quedado obsoleto, y lo más importante: “ha permitido crear el sistema tecnológico necesario para interconectar los distintos centros públicos con un coste mínimo para las arcas municipales de 103.000 euros pagaderos en cómodos plazos”. Se trata, como continúa explicando el alcalde alfasino, de la tecnología más puntera y el ahorro es fundamental “ya que el cableado normal para la instalación de unas cámaras supondría un desembolso cercano al millón de euros” según detalla el informe del técnico municipal, de ahí que se haya optado por el montaje de una red inalámbrica a través de la cual llevar la señal de las cámaras “lo que se conoce como red WIMAX”.
Las primeras diez video cámaras ya están colocadas atendiendo a las indicaciones policiales y vecinales “estarán operativas como muy tarde en octubre” dependiendo de los detalles técnicos necesarios para tenerlas a pleno rendimiento y perfectamente conectadas. En cualquier caso el alcalde, Vicente Arques, si ha hecho hincapié en la versatilidad de este sistema implantado como medida preventiva contra la delincuencia y para velar por la seguridad ciudadana “aunque utilizando la tecnología más puntera” o lo que es lo mismo apostilla Arques “abriendo la puerta al uso de la red WIMAX para transportar otros servicios desde el control de semáforos al sistema de riego lo que a su vez supondría un ahorro extraordinario”.
FUENTE: gn.prensaynoticias.com
El primer teniente de alcalde, Fermín Correa (PP), niega que discrepara de la decisión de colocar cámaras de seguridad en la calle para capturar a los ladrones de árboles. Critica al PSC por rechazar una medida "que buscaba mayor seguridad" y le reprocha el escaso número de agentes (4), "que en julio se quedaron en uno".
Abortada la iniciativa de disponer de cámaras de seguridad en determinados puntos para evitar los robos de árboles que se han dado en las últimas semanas, paso atrás dado por la complejidad de legalizar esa medida, el gobierno de La Victoria de Acentejo (CC-PP) sí tiene previsto tomar otras alternativas para luchar y evitar actos incívicos. El primer teniente de alcalde y líder del PP, Fermín Correa, ha terciado en la polémica y, en declaraciones a EL DÍA, anuncia que, entre otras cosas, el ayuntamiento tiene previsto crear, al menos, dos nuevas plazas de policía el próximo año, pese a las dificultades originadas por la crisis.
Ante las insinuaciones desde la oposición, Correa deja claro que comparte la decisión de instalar las cámaras, si bien no estaba en condiciones de precisar su número, si se situaron en diversas calles (como sostiene el PSC frente a las tesis del alcalde, que las limita a tres a la entrada del pueblo) y si aún quedan algunas instaladas.
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El inspector jefe de la Policía Local de Ibiza, Manuel Ayala, avanzó ayer en la presentación de dos nuevos agentes que «dentro de poco» comenzarán a funcionar las cámaras de seguridad colocadas por el Ayuntamiento en el barrio de ses Figueretes de Vila, aunque no apuntó una fecha concreta. El proyecto de compra, instalación y mantenimiento de las cámaras fue adjudicado en mayo por el Consistorio a la empresa Transportes Blindados S. A. Las cámaras controlarán la delincuencia en las zonas más conflictivas del barrio, por lo que estarán instaladas en las esquinas de las calles Ramón Muntaner y Galicia, País Vasco con Navarra, Formentera con Tarragona, Galicia con Formentera y Periodista Francesc Escanelles con la avenida de Pere Matutes Noguera. El Consistorio responde de esta forma a una de las reivindicaciones históricas de la Asociación de Vecinos de ses Figueretes, una de las zonas de Vila en las que más está trabaja la Policía para erradicar la delincuencia, asegura el Ayuntamiento.
FUENTE: www.diariodeibiza.es
El nuevo alcalde asegura que solo las habilitaron a la entrada del pueblo para detectar al autor(es) del robo de 9 árboles recién plantados, pero que, al tener que legalizarlas y tratarse de un proceso complejo, las retiraron. El PSC lo califica de chapuza, afirma que se situaron en tres vías y que se compraron 10 aparatos.
El nuevo gobierno de La Victoria de Acentejo (CC-PP), que lidera el nacionalista Haroldo Martín, colocó hace unas tres semanas y retiró hace pocos días diversas cámaras de seguridad en la calle para intentar evitar robos y detectar quién estaba llevándose los árboles que se están plantando a la entrada del pueblo. Esta es la versión que dio ayer el alcalde tras la denuncia efectuada a EL DÍA por el ex mandatario y líder de la oposición, Manuel Correa (PSC), quien califica lo ocurrido de "chapuza y malgasto del dinero público", aparte de sostener que los aparatos se ubicaron en tres vías y que se compraron un total de 10.
Frente a estas tesis, Martín indicó ayer a este periódico que decidieron colocar cámaras "de apenas 40 ó 50 euros de coste y de andar por casa" en la entrada principal al casco municipal "para intentar saber quién o quiénes han robado ya hasta nueve árboles (similares a los laureles de Indias) que el consistorio ha ido plantando en las últimas semanas". Según su versión, decidieron esta medida por considerar que era la mejor fórmula para evitar el hurto de un bien público, aunque, una vez colocados, el máximo mandatario consultó con la Policía Local, que le informó de que esa instalación debía ser legalizada y que se trataba de un proceso "muy complejo. Por eso hemos decidido quitarlas, pero en ningún caso porque los vecinos las hayan rechazado. Además, conviene recordar que en el Cuadrilátero lagunero las colocaron durante mucho tiempo, pero, al final, también acabaron por retirarlas por su legalización".
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La Audiencia de Málaga ha confirmado la condena impuesta a una mujer que enganchó la luz de su vivienda al contador de la comunidad de vecinos y que inutilizó la cámara de seguridad instalada en el cuadro de contadores. Así, se desestima el recurso de apelación presentado por la defensa de la acusada.
Según declaró probado el Juzgado de lo Penal número 6 de Málaga, en mayo de 2009, la mujer "enganchó la luz de su vivienda", ubicada en la capital malagueña, al contador de la comunidad de propietarios, procediendo seguidamente a inutilizar una cámara de seguridad instalada allí con un espray amarillo.
Estas acciones, según dicha resolución, supusieron unos desperfectos valorados en unos 500 euros. Así, se le condenó por un delito de daños y por una falta de defraudación, en este caso, de electricidad, al pago de 1.260 euros y a indemnizar a la comunidad de vecinos en la cantidad en que se fijaron los desperfectos.
Dicha resolución fue recurrida por la defensa de la mujer, aunque la Sala ahora, en una sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, rechaza las argumentaciones y mantiene que el delito de daños ha sido declarado probado "tras un relato de hecho concreto y preciso".
Además, se basa en las manifestaciones de un testigo, que insistió en que "vio las imágenes grabadas de la inquilina, que tenía problemas con el dueño del piso", ratificando su denuncia y los daños que sufrió la cámara de seguridad, lo que llevó a la jueza al convencimiento de que la acusada cometió los hechos.
FUENTE: www.europapress.es